kaleastam

Recuerdo la última vez que me dijiste que me querías. Acabábamos de hacer el amor y entre la somnolencia susurraste un “te quiero”. Entonces ya leía la mentira en tus ojos. Pero tu boca disimulaba tan bien... No sé exactamente lo que me hizo darme cuenta de que tus caricias eran fingidas. Tan solo lo supe. Aquella misma noche empecé a sentirme extraño. Estaba estirado en la cama, contigo al lado. Sentía el calor de tu cuerpo, tu respiración, pero empezabas a ser nada para mí. Dormida eras solo un peso a mi lado. Y yo pensaba en ti, en aquella que ya no estaba conmigo. Cerré los ojos y me mareé. Todo daba vueltas a mí alrededor. No era solo una sensación, era real. Podía sentirlo. Al fin me dormí. Y soñé. Fue un sueño muy largo y muy extraño: cortinas de satén azul azotadas por el viento. Habitaciones cerradas, sin ventanas, espaciosas como el firmamento. El suelo era de arena y en las paredes se podía oír el mar. Yo volaba buscándote. No hacía más que dar vueltas de habitación en habit

Bien, pues aunque intenté ser optimista respecto al año que acabamos de estrenar, pues de momento todo sigue igual o peor. Me tengo que poner las pilas, ya! Porque creo que hay cosas que ya no tienen solución y no me puedo aferrar a algo que no podrá ser nunca más. Tengo que ser realista para no darme de cabezazos contra pared. Tengo la cabeza hecha un lío y he perdido de vista mis prioridades. Desde navidad que ni me peso y teniendo en cuenta que he pasado de todo estas semanas ... no quiero ni hacerlo. Borré mis fotos de este verano de la camara y en el único sitio donde las había descargado era en el pc de la oficina, que por supuesto, murió y lo tienen que formatear. Por suerte colgué varias en flickr y aún puedo rescatar algunas .... eran las de Olot, habían quedado preciosas. Mi intención de gimnasio (que lo necesito de veras) se está diluendo también. A ver si cargo pilas este fin de semana que he quedado para un concierto rumbero y una calçotada con unos amigos. Y seguramente p